Hace un par de semanas, un amigo se me puso a comentar frasecillas de los dos últimos capítulos de la segunda temporada de la nueva versión del Doctor Who -anda que no he rebuscado la frase-, así que me entraron ganas de volver a verlos. ¡Y qué dos capítulos!
Doctor Who The Army of Ghosts y Doctor Who Doomsday sirven para hacer una de las grandes delicias de los fans de la serie, enfrentar a los Cybermen y los Dalkes y de paso, vale a los productores para deshacerse de unos de los protagonistas, Rose Tyler (Billie Piper) y introducir la organización de su spin-off de la serie: Torchwood.
Después de dar muchos paseitos por el espacio y tiempo, el Doctor junto con Rose deciden ir a visitar a la madre de esta última, y ahí se encuentran con una especie de apariciones de fantasmas por todo el mundo. Eso si, fantasmas muy ingleses que aparecen puntuales todos los días a la misma hora.
Mientras todo el mundo piensa que eso es maravilloso, el Doctor obviamente no le gusta un pelo y se pone a investigar sobre el tema. Eso mismo lo lleva hasta Torchwood, organización fundada por su culpa después de un encuentro con la reina Victoria en el siglo XIX. Nada más llegar allí, el Doctor descubre que los dichos fantasmas son realmente Cybermen intentado cruzar de otra dimensión para invadir La Tierra con la que no pueden en su universo. Si eso de por sí ya no era complicado, de una nave que viaja a través del vacio interdimensional reaparecen un grupo de Daleks, una unidad especial diseñada a pensar como sus enemigos, hasta tienen nombre propio y todo.
Mientras los Cybermen y los Daleks se enzarzan en una guerra que probablemente destruya a los Cybermen y deje a los Daleks como vencedores, ¿Quién dijo que ambas fuerzas jugaban en la misma liga?, el Doctor tiene que pensar en como destruirlos a todos y al mismo tiempo cerrar la brecha interdimensinal que amenaza con engullirse a ambos universos. Vamos, el pan nuestro de cada día para el Doctor.
Estos dos capítulos se saborean en todo momento, desde el primer minuto con las discusiones tontas con la madre de Rose, hasta los últimos momentos. Tal vez las últimas escenas de despedida entre Rose y el Doctor se hacen un poco empalagosas, pero bueno, vuelven a destacar el aspecto de solitario del Doctor, que solamente a ratos encuentra una compañera para acompañarlo en la eternidad.
Más posts sobre estos capítulos: Cita del Doctor WHO.
Más en: Doctor Who, Hoja de ruta de capítulos por comentar.
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