Esta es el segundo libro de la historia empezado por John Scalzi en La Vieja Guardia, aunque se puede leer perfectamente sin haber leído el anterior (no como el que estoy leyendo ahora, Zöe’s Tale, que me acabo de dar cuenta que está basado en otro libro ya contado, pero visto desde un protagonista distinto).
La verdad es que esta segunda historia dentro de este universo creado por John Scalzi sabe a poco, sobretodo comparándola con la anterior. Es un capítulo más que no añade mucha información. Pero que a todos los aficionados, como yo, al space opera, disfrutaréis desde la primera página. Vamos, creo que debió ser uno de los libros que antes terminé de leer este año.
De la contraportada (cuidado, está toda llena de spoilers)
Las Brigadas Fantasma son tropas de elite creadas a partir del ADN de los muertos y transformadas en soldados perfectos para las operaciones más duras. Son jóvenes, rápidos y fuertes y carecen de escrúpulos
El universo es un lugar peligrosos para la Humanidad y está a punto de serlo mucho más, ya que tres razas alienígeneas se ha unido contra lo humanos. Cuentan con un importante aliado: el científico militar Charles Boutin, que ha traicionado a la Humanidad y ha desvelado los mayores secretos de las Fuerzas de Defensa Coloniales. Para vencer, las FDC deberán averiguar qué ha llevado a Boutin a cometer semajante acto.
La clave para resolver este enigma se llama Jared Dirac, un híbrido superhumano, creado a partir del ADN de Boutin, y en cuyo cerebro se ha volcado la memoria del traidor. PEro cuando la transferencia falla, Jared es trasladado a las Brigadas Fantasma.
Allí se convierte en un soldado perfecto, hasta que los recuerdos de Boutin comienzan a manifestarse. Jared, para obtener respuestas, emprenderá entonces una búsqueda desesperada de su «padre,» pero el tiempo corre en su contra: la alianza alienígena está preparando su ofensiva y planean cosas peores que la mere derrota militar de la Humanidad.
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