El Jueves Santo pasado tuve la oportunidad de probar el Yspahan, un sencillo y muy entretenido juego de tablero. En esta ocasión somos comerciantes que durante tres semanas vamos a tener que intentar controlar el mayor número de tiendas en cuatro regiones diferentes.
Cada jugador debe tirar unos nueve dados. Los agrupará por números, todos los dados en los que saliese un 6, todos en los que saliese un 5 y así hasta el 1. Los dados del 6 los colocará en la ficha que dan dinero. Los dados de 1 en las fichas que dan camellos. Y después, empezando por un orden determinado, colocará el resto de los grupos de dados en cada una de las regiones donde se pueden controlar tiendas.
El jugador que tiró los dados escogerá una de las opciones disponibles. Si coje las de monedas, recibirá tantas monedas como dados de 6. Si elige la de camellos, pues lo mismo, pero en este caso recibirá tantos camellos como dados de 1. Si decide por cada una de las otras zonas, podrá colocar tantos marcadores/cubitos en la región determinada por el número de dados correspondiente. También puede optar, en vez de coger estas cosas, en mover una ficha blanca por el tablero -no me acuerdo como se llamaba,- para quitar cubitos de otros jugadores del tablero.
Con el dinero y los camellos podemos comprar diferentes poderes especiales. Un camello más cada vez que cobremos camellos, dos monedas más cada vez que cobremos monedas. Un cubito más cada vez que pongamos en el tablero, etc…
El juego en sí es bastante rápido, sobretodo si es jugado por cuatro personas -número máximo de jugadores.- El juego permite varias estrategias, incluso ir cambiado de ellas de semana a semana, o en medio de la semana, dado que construir, la caravana de camellos o las cartas especiales, pueden darte muchos puntos. Por el momento, solamente llevo unas tres partidas al mismo, pero desde luego promete bastantes ratos de diversión, sobretodo, por el hecho de tener que tirar nueve o doce dados.
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